Los Orcos de piel verde son unas de las razas más prolíficas de Azeroth. Nacidos en el mundo de Draenor, los orcos llegaron a Azeroth a través del portal dimensional conocidos como El Portal Oscuro, comenzando una guerra contra los Humanos, influenciados por la Legión Ardiente.
Los orcos crearon una noble y chamanistica sociedad en Draenor. Trágicamente, los orgullosos clanes orcos fueron corrompidos por la Legión Ardiente y usados como peones en la invasión de la legión a Azeroth. Sin emabrgo los orcos se rebelaron y al final consiguieron ayudar a pagar con la misma moneda a sus antiguos maestros.
Liderados por el joven jefe de guerra zagal los orcos han recuperado su fuerza y honor. Los orcos se mudaron de los reinos del este hacia Kalimdor y allí se fundó la nación del Durotar.
Ahora los orcos no están dispuestos a luchar por la causa de la conquista sino por su propio derecho de supervivencia en ese mundo adoptivo.
En los albores
Los orcos de Draenor han vivido una sociedad chamanica y noble. Fueron nómadas habitaron en las frondosas praderas de Nagrand en su polvoriento planeta natal, Draenor, durante más de 5000 años. Ellos vivían en paz con los Draeneis y estaban en guerra con los ogros. La presencia de los draeneis alertaron a la Legión Ardiente. Después de investigar el mundo, el poderoso señor demoniaco Kil’jaeden engaño a un respetado chamán llamado Ner’zhul y lo puso al servicio de la Legión Ardiente. Ner’zhul y todos los orcos podrían recibir el poder necesario para conquistar nuevas y vastas tierras a cambio Kil’jaeden obtendría un ejército capaz de aplastar a los Draeneis. Para obtener este poder los orcos tendrían que beber la sangre de Mannoroth, el destructor, un poderoso señor del foso. Gromm Grito Infernal fue uno de los primeros en beber y le costó mucho convencer a los jefes de otros clanes a seguir su ejemplo. Esto les hizo adquirir la maldición de sangre.
Visiones de Medivh
Una noche una poderosa entidad tocó los pensamientos de muchos brujos orcos. Gul’dan buscó el consejo de Kil’jaeden sobre qué podría ser esta presencia pero pero su convocatoria no fue contestada. Si el propio mentor de Gul’dan, Kil’jaeden temia esta presencia podría ser una poderosa herramienta para retomar el contacto con él. Semanas más tarde, Gul’dan finalmente tuvo exito y abrio la comunicación con Medivh un hechicero de un mundo lejano. Gul’dan intentó descubrir las intenciones de Medivh pero la mente de Medivh actúa demasiado rápido para qué Gul’dan pudiese descubrir algo de valor. Gul’dan sabía que Medivh estaba intentando hacer lo mismo y no quería que Medivh ganase ventaja así que rompió rápidamente el contacto.
Medivh más tarde regresó los sueños de los brujos de Draenor, en sus sueños mostraba imágenes de la tierra de Azeroth. El Consejo de la Sombra a pesar de no saber la verdadera intención de Medivh decidió permitir a Medivh mostrar una forma de traer a la horda a Azeroth. Los brujos que no eran miembros del Consejo pero habían experimentado la visión fueron asesinados para mantener el secreto de la invasión que iba a acontecer. Pasaron las semanas sin nuevas noticias de Medivh y algunos miembros del Consejo creía que estaba jugando con ellos.. Pero entonces apareció la grieta.
La invasión de Azeroth
Con el tiempo y mucho esfuerzo los brujos orcos fueron capaces de ampliar la brecha lo suficiente para que los orcos pasasen a través de ella. Aunque sus primeros exploradores enloquecieron, ya sea por por la propia brecha o bien por lo que habían visto en el otro mundo, el Consejo había podido confirmar que del otro lado de la grieta en el mundo que Medivh les había mostrado. Un pequeño contingente de orcos fueron enviados a través de la brecha que se estabilizó completamente, ahora era conocido como el portal oscuro.
La cautela que pidió el Consejo de la sombra cayeron en oídos sordos cuando los jefes de clan se enteraron de lo aparentemente débiles eran los humanos. El ansia de sangre pronto superó a la horda, y lanzó un ataque preventivo contra poderoso establecimiento de los humanos, el reino Ventormenta. Dirigidos por Cho’gall del clan Martillo Crepuscular y Killrogg Deadeye del Clan Foso Sangrante. Este ataque terminó en una humillante derrota para la Horda. Cada jefe culpó al otro por este fracaso y terminó con la división en dos facciones dentro de la horda. El Consejo de la sombra intentó reunir a la Horda, pero no podrían actuar directamente por lo que optaron por utilizar a una marioneta; Blackhand el Destructor fue nombrado jefe de guerra de la horda.
La locura de Guldan
Con la victoria a la vista, Gul’dan convenció a Cho’gall del Clan Martillo Crepuscular que sabía la ubicación de la tumba de Sargeras. Juntos, con el clan Stromreaver abandonaron sus puestos y decidieron reclamar el poder demoníaco para ellos mismos. Esta pérdida de casi un tercio de la horda llevó su campaña a un punto muerto justo a las puertas de Lordaeron. DoomHammer, furioso por la insubordinación en un momento tan critico desplegó una gran parte sus propias fuerzas para atacar los clanes y a sus líderes que decidieron desertar. Esto permite a la Alianza reunirse y aplastar a la horda mientras estaban divididos. Con la destrucción del portal oscuro la segunda guerra terminó. Aunque un gran número de hombres poderosos del reino de Lordaeron querían a los orcos detenidos y ejecutados, el Rey Terenas los ignoró y y los encerró en campos de internamiento con la esperanza de que algún día pierdan su sed de sangre. Allí aislados de sus gobernantes demoniacos y sin manera de hacer robar su aguante vil, los orcos languidecían y finalmente cayeron en un letargo.
El ascenso de Thrall
Varios años después de la segunda guerra, Thrall, hijo de Durotan, escapó de su cruel amo humano, Aedelas Blackmoore en el campo de internamiento en Durnholde y se dispuso a encontrar al resto de su pueblo. En sus viajes encontró con que un Grom Grito Infernal, quien junto a su clan Grito de Guerra, habían estado escondiéndose las tierras de Azeroth con la esperanza de consquistarla. Thrall se convirtió en su amigo y finalmente se reunió con Ogrim Martillo Maldito, que había escapado de los humanos varios años antes. De mano de Martillo Maldito aprendió cosas de su padre, de los lobo gélido y de la traición cometida por el Consejo de las sombras hacia su padre. Después de enterarse de esto, Thrall se dirigió al fuerte del Clan Lobo Gélido donde el chaman Drek’Thar le enseñó a acerca sobre el noble patrimonio de los orcos y de la forma que había sido corrompida por los demonios. Pero juro liberar a su pueblo de las cadenas que les ataban. Y como nuevo estudiante de Drek’thar, emprendió el camino del chamán. Junto con Grom y Ogrim,Thrall lanzó con éxito un ataque tras otro con otro contra los campos de internamiento para liberar a los orcos cautivos. Es difícil despertar los orcos de su letargo, pero Thrall fue capaz de demostrar que su destino aún está por escribir y los clanes se unieron tras la nueva horda. Pero durante un ataque a un campamento de internamiento Ogrim fue derribado. En homenaje a la fiera y orgullosa figura orca, Thrall vistie la armadura de Ogrim y empuñó su martillo. Este martillo que lleva su nombre, lo utilizará para liberar a la horda de su cautiverio. Este campo de internamiento fue capturado por la horda, rebautizada en honor Martillo Maldito y ahora se llama Sentencia (Hammerfall) en las Tierras Altas de Arathi..
Thrall sabía que las naciones humanas no podrían permanecer de brazos curzados mucho tiempo y mucho menos para la reagrupación de la horda o su establecimiento. Afortunadamente para Thrall, un profeta apareció en forma de cuervo y aconsejó que abandonaba a Los Reinos del Este hacia la lejana tierra de Kalimdor. Thrall, al no tener mejores alternativas, cogió unos barcos humanos y puso rumbo a la nueva tierra habiendo rescatado a todos los orcos del Lordaeron. Durante el viaje, los orcos ayudaron a la tribu de Trolls Lanzanegra a escapar de su isla que se hundía.Los trols Lanzanegra quedaron inmensamente agradecidos a Thrall y juraron lealtad a la nueva horda. Cuando llegaron a Kalimdor, fueron recibidos por Cairne Pezuñasangrante y sus taurens. Los orcos ayudaron a defenderse contra los centauros y a cambio les dijo la ubicación del oráculo. Sin embargo el clan Grito de Guerra todo de guerra fue enviado a Vallefresno para conseguir madera, como castigo por atacar a los humanos sin permiso. Allí lucharon contra los elfos de la noche. El señor del Foso Mannoroth se aprovecho del hecho de que los orcos están perdiendo para ofrecerles de nuevo su sangre. Thrall se alió con la hechicera humana Jaina Valiente por indicación del profeta (que en realidad era Medivh). Capturaron a Grom Grito Infernal, padre de Garrosh, y lo volvieron a la normalidad. Entonces este al se fue con él para hacerle frente a Mannoroth. Thrall rápidamente fue vencido, pero Grom fue capaz de matar al demonio, aunque le costó su propia vida, aún así consiguió liberar a los orcos de su señor demoníaco. Tras ello su hijo uso los cuernos del demonio como parte de su armadura para rendir homenaje a su padre.
La fundación Durotar
Con la Batalla de Monte Hyjal terminada, y con ella la amenaza inminente para el mundo,Thrall es establecido la nueva patria de los orcos en Kalimdor. La llamó Durotar en honor a su padre, y fundó la ciudad de Ogrimmar en honor a Ogrimm Martillo Maldito. Los taurens pasaron a formar parte de la horda y con el apoyo de los supervivientes de Lordaeron dirigidos por Jaina Valiente, Thrall fue capaz de construir rápidamente la ciudad. Sin embargo, no estaba terminada. El gran almirante Daelin Valiente, el padre Jaina, llegó a Kalimdor (habiendo dejado la guerra antes de terminar para buscar todos los puestos supervivientes) y lanzó un ataque contra la nación de orcos en ciernes. Durante el asalto inicial los Trolls Lanzanegra perdieron su nuevo hogar las Islas Eco. Y con ayuda del Mok’Nathal, el semiorco, Rexxar fueron a vivir con los orcos en Durotar. El doctor brujo Vol’jin prometió fidelidad eterna a la horda.
Thrall sin saber que humanos les había atacado en un principio se sospechó de las fuerzas de Jaina pero su lealtad probada cuando ayudó a los orcos a destruir las fuerzas invasoras de su padre, el Almirante Valiente.
Cultura
Aúnque una vez símbolo del mal y corrupción, la horda ha recuperado el altar de las tormentas como parte de su renacimiento. La sociedad Orca se ha caracterizado siempre por su robusta y resistente consistencia. Como resultado, son pragmáticos y nunca tienen miedo de matar si con ello se protegerá el futuro de la horda o el clan. Todos los orcos, independientemente del sexo o su rango, tienen que poder cargar consigo mismos, el no poder se considera debilidad. La debilidad es algo que disgusta a todos y es castigado con la mayor humillación de un orco puede recibir: el exilio. Pero Thrall y los Lobo Gélido son importantes por traer un soplo de compasión a la horda también se les atribuye un tratamiento más amable con los peones, que hasta entonces habían sido considerados como una sub-raza despreciable. Por otro lado los Clanes como Grito de Guerra se aferran a las antiguas y rígidas creencias de la horda original.
Sin embargo, independientemente de su afiliación a un clan la cosa más importante por encima incluso vida misma es el honor, el horno a su clan y por extensión, a la horda. Del mismo modo la hospitalidad es considerada uno de los mayores honores y que pueden ofrecer. Los orcos y los taurens se han convertido rápidamente en aliados, porque los taurens ofrecieron con gusto refugio a los orcos en una tierra nueva y extraña.
No hay discriminación entre los géneros en la sociedad orca. Las mujeres son capaces de seguir las mismas opciones profesionales que sigan los hombres, a los mismos puestos de poder e incluso se espera que respondan a la llamada a las armas al igual que lo hacen los hombres. La fuerza (tanto fisica como mental), valor, iniciativa y autonomía son rasgos muy preciados entre los Orcos.
Fe
La religión orca tiene los orígenes una fe animista y mantiene paralelismos extraños con las prácticas de los Kladoreis. Los chamanes orcos reciben su poder de los espíritus elementales, forman una conexión íntima con el mundo elemental que les rodea. Esta conciencia les he llevado a conocer su verdadera naturaleza y viven en armonía con el mundo mucho más algunas razas de la alianza.
Apariencia
Los orcos machos parecen brutales y enormes criaturas. Pensando en torno a 250 ó 300 libras y midiendo entre seis y y siete pies de altura, no es una raza pequeña. Incluso laa mujeres orcos tienden a ser sólo medio pie más bajas y pesan en torno a 50 ó 100 libras menos que los hombres, con hombros anchos y musculosos y cuerpos poderosos. Los orcos suelen tener el pelo grueso y barba, a menudo negro o de color marrón, gris en la vejez. Los orcos macho a veces optan por dejarse crecer la barba de forma salvaje, mientras que otros prefieren trenzarlas. Estas barbas siempre cuelgan de la barbilla, puesto en los orcos no les crece vello facial por encima del labio superior. Los orcos son de piel verde, por lo general van desde un amarillo claro o un verde pálido a un oliva oscuro o verde esmeralda, los orcos viles a menudo tienen la piel roja. Los orcos que no tiene la maldición de sangre, tienen la piel marrón.
Los ojos de los orcos pueden ser azules, marrones, color avellana, ambar, rojo y los orcos que bebieron sangre demoniaca tenían los ojos rojos y brillaban. Los ojos azules puros son muy raros en la raza orca y y son vistos como un signo de gran destino. Thrall tiene los ojos azules, Garona en algunas representaciones también, pero esto puede deberse a su sangre draenei y no tenga nada que ver con su destino.
@Vía: WoWWiki